¿Apoyo o ardid político?

¿Apoyo o ardid político?

Deducible para los que pagan colegiatura en escuelas privadas.

Se ha desatado un debate en los diferentes sectores de la sociedad mexicana ante el anuncio del presidente Calderón de que entra en vigor  la deducción de las colegiaturas de colegios privados del impuesto sobre la renta (ISR).

Se presentan interrogantes ¿es el inicio de un camino hacia el total abandono de la educación pública? ¿Los beneficios son solo para los de clase alta? ¿Está pensada en apoyar a los contribuyentes cautivos?

Uno de los analistas  de este tema es Leo Zuckerman, que analiza esta política pública y su impacto en un país donde la mitad de su población está en la extrema pobreza, y la otra mitad la conforman la población trabajadora, cautiva del impuesto sobre la renta.

Considera que esta medida no sólo beneficia a la clase alta sino está pensada para la clase media. Esta planteada con base en el supuesto de que el contribuyente podrá deducir impuesto de la siguiente manera: si un padre de familia que tiene a su hijo en una escuela privada en el nivel de primaria en el cual su costo anual es de 12 mil 900, al hacer la deducción sobre la base gravable, es decir, sobre el ingreso del contribuyente al aplicar la taza mayor del ISR a esa cantidad, el estimulo monetario  sería de tres mil 870 pesos, lo cual apoya su economía familiar, cabe señalar que la mayoría de la gente trabajadora ingresa a sus hijos en una escuela privada por que se cumplen todos los días laborales, sin tanto ausentismo, pueden dejar a sus hijos hasta media tarde que es cuando salen del trabajo . Aunque esto no quiere decir que el servicio educativo sea lo mejor.

 Claro los costos  dependen  de la escuela privada y el nivel que se curse; lo cual no es comparado con lo que implica el costo beneficio de un alumno de escuela pública.

Es verdad que esta deducción impuesta,  beneficia a la población  que no es completamente pobre, pero en su mayoría es  clase trabajadora. En este sentido surge una interrogante ¿será que esta población no merece de vez en cuando que el gobierno apoye su economía?

Es necesario reconocer que se podrá deducir las colegiaturas  a los que  pagan impuesto, por lo tanto son los que tienen registro federal de causantes que es la población cautiva de este régimen,  la cual siempre es la más afectada, cuando suben el porcentaje de impuesto y el salario mínimo  aumenta precariamente .

También hay sectores que no podrán salir beneficiados como la población que vive de la informalidad económica, e impacta a las escuelas privadas “patito” que trabajan sin estar con registro.

Lo que es cierto, esta medida de ningún modo, va a solucionar el problema educativo del país, ya que el desempeño académico del alumno no depende si va a una escuela pública o privada sino de múltiples factores que inciden en la escuela, sistema educativo, plan y programas de estudio, directivos, docentes.

Este anuncio es de carácter económico y sobre todo político, ya que apoyando a la clase media, con estos decretos la población beneficiada sea manipulable para las próximas elecciones. Aún existen interrogantes, porque en un país de corrupción, envuelto en la violencia; donde la educación es pagada por los contribuyentes ¿cómo se va a recuperar este déficit? ¿esta planteada para beneficiar o para perjudicar a la educación pública?

Una arista que hay que replantearse, es que la educación básica y media está a merced de un  sindicato corrupto, que lo sostiene los deducibles de su propio personal, sin que esta se preocupe por mejorar el servicio de sus propios contribuyentes.

Para mejorar la educación es necesario fortalecerla, mejorar la infraestructura y sobre todo que los diferentes actores involucrados estén comprometidos y con sentido de justicia social, para dar igualdad de oportunidades a los niños y jóvenes de este país…es decir …una educación de calidad.

María Elena

Febrero 2011